El restaurante madrileño se ha convertido en punto de encuentro durante una gran jornada de acción social.
Los versos de Luis Quiñones de Benavente nos hacen el halago para conmemorar el día de San Isidro. De Madrid al cielo, cita el afamado escritor, dando cuenta de lo especial de una ciudad que contiene el aliento y mantiene el ánimo durante el desconfinamiento. No es fácil. Las colas del hambre se expanden tan rápido como cualquier epidemia y adolecen de un remedio que exige compromiso y tiempo. Según las cifras del periódico “La Vanguardia”, hay 80.000 familias que dependen de las ayudas sociales del Ayuntamiento para poder comer. ¿Qué ocurre con los que no están en los registros? La respuesta es inadmisible: están desamparados. “Tenemos filas interminables de personas esperando el menú y los paquetes de alimentos”, afirma Alba, responsable en la Plataforma de Ayudas al Desempleado del barrio de San Blas.
Fuera de las estadísticas sobreviven familias como las que hoy han visitado el restaurante Casa Carmela en una jornada de reparto especial. Cincuenta menús solidarios han sido regalados desde las cocinas del local con la ayuda de la Asociación de Vecinos. A cargo de la decoración, la floristería LatinFlower, que ha repartido claveles rojos en honor al santo patrón. “Los niños no se van a quedar sin comer porque nosotros estemos en la cama”, confiesa Jaime Rincón, director de Casa Carmela. Desde las siete de la mañana lleva funcionando este empresario madrileño, recogiendo pedidos y organizando el día. Mas de cien raciones de cochinillo se han llevado los afortunados clientes. Los bocadillos de calamares y el chocolate con churros también se han agotado, sólo los más pícaros han logrado hacerse con ellos.
Ha sido una jornada excepcional enmarcada por la armonía de voces y risas de los implicados. El proyecto #comidaparatodos ha recaudado 3.381 euros desde que empezó la semana pasada. Una cifra que comienza a llamar la atención de las empresas de la zona, cada vez más interesadas en sumarse a la iniciativa.
Autor: Arturo Delgado